viernes, mayo 30, 2008

EL CINE AL SERVICIO DEL DIABLO

Tomado de Patria Digital.com


El cine al servicio del diablo

Por Jorge Gómez

Los disidentes en Cuba que luchan por sus derechos cívicos y la libertad de expresión, son llamados terroristas por las autoridades cubanas. Las bandas de delincuentes comunes que operan en Colombia secuestrando personas, violando niñas, matando campesinos, y traficando con drogas, son héroes guerrilleros revolucionarios, seguidores del Ché.

Así, con estos gráciles y bien calibrados sentimientos y propuestas, se estrenó con Benicio del Toro otra película acerca del malogrado guerrillero argentino, que en realidad no fue más que un fracasado en todos los frentes humanos. Como médico nunca ejerció, como padre o marido nunca cumplió, y cuando se lanzó como protagonista a su propia aventura guerrillera, se la pasó huyendo hasta que lo cazaron como una liebre en Bolivia, donde nunca fue bienvenido ni por los pobres ni por los campesinos, como él mismo alegó en su diario. "Uno tiene que darle sus respetos al hombre", dijo Benicio, también ganador de un premio Oscar. "El proyecto es del 'Che'. Todo el mundo trabajó bajo la historia del 'Che'. Todos los premios y galardones le pertenecen a él".Del Toro dijo "busqué el lado más humano del revolucionario, mucho más allá del icono que decora camisetas y afiches alrededor del mundo". "No lo saqué de mi imaginación. Uno lee mucho, se reúne con gente que lo conoció. Analiza los pro y los contra del personaje y trabaja en base a las fotografías y todo el material fílmico que pueda conseguir. Y así uno emprende la tarea", dijo sobre cómo se preparó para encarnarlo al día siguiente del estreno.Lo mas trascendental del Che se ignora maliciosamente en el film, que no fue más que su protagonismo criminal en la fortaleza La Cabaña, convertida en prisión por el castrismo, donde el asmático argentino jugo a ser Nerón mandando a fusilar en juicios sumarios a cientos de personas.

A lo largo de cuatro horas y media, "The Argentine" y "Guerrilla", que se proyectaron consecutivamente el pasado miércoles en el magno evento cinematográfico, (Festival de Cine de Cannes) muestran el papel protagónico de Guevara en la Revolución Cubana y su intento por llevar su ideología a otros países de Latinoamérica, empezando por Bolivia.Lo muestran muy romántico y coherente, pero la realidad es otra. Si el Che y su ideología, que odiaba cualquier forma de capitalismo, hubiesen triunfado en el mundo, Hollywood no existiría, ni tampoco Benicio del Toro, que por cierto, a pesar del maquillaje y de todos los trucos digitales con que se maneja el cine en la actualidad, representa un Ché con rasgos de mongólico triste.